Los rumores sobre el relevo en la Dirección de Radio Torreón comenzaron a sonar desde el miércoles, pero fue hasta este viernes a media mañana cuando se concretó. Se supo que el ahora ex director, Armando Cobián Lafont, hizo lo posible por quedarse, incluso con una visita a la Ciudad de México que no cayó nada bien en el séptimo piso de la Presidencia Municipal. De cualquier manera, la decisión estaba tomada, y no precisamente en la oficina del todavía alcalde Román Alberto Cepeda. La –necesaria y urgente– intervención del gobierno local continúa y nadie tiene la quincena asegurada.
Perfil periodista
La llegada de Luis Guillermo Hernández Aranda a la Dirección de Radio Torreón y al proyecto de la televisora del Ayuntamiento significa aire fresco para la atribulada administración municipal. Su perfil es el de periodista, con casi 30 años de trayectoria y reconocimiento dentro y fuera del gremio.
Lo que viene en la radioemisora del gobierno local es una reestructura a fondo: revisión de nómina y gastos, además de una reingeniería de contenidos. Vaya tarea la que tiene enfrente Hernández Aranda.
Retenes con “Madrinas”
Este viernes por la tarde el tráfico se complicó en la caseta de peaje “La Cuchilla”, sobre la carretera Torreón-Saltillo. Metros más adelante, supuestos agentes de la Fiscalía General de la República, encapuchados y sin identificarse, montaron un retén. La fila de camionetas y vehículos familiares se hizo larga.
Entre semana, automovilistas reportaron un despliegue similar sobre la carretera San Pedro-Cuatro Ciénegas. Los federales andan desatados. La Navidad se adelantó.
Lo peor es que no todos los que participan son agentes en activo. ¡Qué peligroso resulta ver de nuevo a “Las Madrinas”, cuyo negro historial parecía sepultado! ¿Y Efraín Gastelum Padilla, delegado de la FGR en Coahuila? Dicen que ni enterado está.
Fuego controlado
Alfredo Flores Originales no lo dudó cuando, al salir del Centro de Convenciones de Torreón, se topó con un vehículo en llamas. El director de Seguridad Pública Municipal bajó de su camioneta y, junto con los agentes que lo escoltaban se encargó de contener el incendio mientras llegaban los bomberos.
Por lo visto, “El Costeño” es maestro en el arte de apagar fuegos; ya lo mostró en mayo, cuando tomó las riendas de la corporación en medio de un auténtico caldero. La diferencia es que entonces no bastaba con un extinguidor y supo echar mano de mucha mano izquierda.
