
Ciudad de México.- Entre los escombros ennegrecidos y los vehículos calcinados que dejó la explosión de una pipa de gas LP bajo el Puente de la Concordia, un celular chamuscado se convirtió en un rayo de esperanza. Pese a las llamas y el impacto, el dispositivo seguía sonando y permitió dar con los familiares de Ana Daniela, una estudiante de Ingeniería en Alimentos de la UNAM cuyo paradero aún es incierto. El teléfono fue hallado dentro de una mochila con cuadernos, maquillaje y una cartera, y respondido por Francisco Bucio, integrante de Protección Civil capitalina, quien contestó la llamada y habló primero con Raymundo Barragán, padre de la joven. “El teléfono está medio quemado, pero al menos se pudo contestar”, explicó Bucio al hombre que, desesperado, buscaba noticias de su hija. Minutos después, el rescatista también habló con la madre de Ana Daniela, a quien explicó lo sucedido y le prometió mantenerla informada. El aparato dañado, que resistió el fuego y la onda expansiva, permitió enlazar a los padres con los primeros indicios sobre su hija. Mientras tanto, las autoridades investigan si la explosión fue causada por la volcadura de la pipa, ocurrida este miércoles alrededor de las 14:00 horas. Hasta el momento, se desconoce el estado de salud de la estudiante, y su familia permanece a la espera de noticias.