
Ciudad de México.–Ciudad de México.– Armando Christian Pérez, mejor conocido como Pitbull, abrió su corazón en una entrevista con Yordi Rosado, donde habló sobre los retos de su infancia como hijo de inmigrantes latinoamericanos, las carencias que enfrentó y cómo esas experiencias lo marcaron antes de convertirse en Mr. Worldwide.
El cantante reveló que comenzó a trabajar desde los cinco años para ayudar a su familia. “Yo empecé a trabajar a los cinco años en un pulguero y vendía camisas con mi mamá, ella me enseñaba a hablar con la gente”, contó. También recordó que se desempeñó en distintos oficios: “Limpiaba jaulas de pájaro, vendía agua, cable… yo era un chamaquito, les decía a los carros dónde podían parquear”.
Tras el divorcio de sus padres, Pitbull fue criado principalmente por mujeres de su familia, a quienes atribuye gran parte de su formación: “Ellas me enseñaron disciplina, a pensar de manera estratégica y a mantenerme lejos de los vicios”, dijo al recordar que su abuela le repetía que “hay tiempo para todo” y que debía enfocarse en trabajar duro.
El artista también confesó que pasó parte de su niñez en Atlanta, en circunstancias difíciles, lo que lo llevó a vivir temporalmente con una familia americana que incluso consideró adoptarlo.
“Esa familia se portó muy bien conmigo”, recordó, aunque todo cambió cuando su madre se enteró: “Dos horas, agarra tus cosas, voy a recogerte”, le dijo antes de llevárselo definitivamente. Pitbull reconoció que, aunque su madre enfrentó muchas complicaciones, siempre le enseñó a sobrevivir: “Me dio cariño, muchas cosas, pero más que nada, me estaba entrenando para la vida”.
Hoy, el intérprete de éxitos como Give Me Everything y Timber asegura que todo lo aprendido en aquellos años lo aplicó tanto en su vida como en su carrera musical, forjando el carácter que lo llevó a triunfar en la industria internacional.