
Ciudad de México.- Una tarjeta deportiva coleccionable firmada, por Michael Jordan y Kobe Bryant, se vendió por 12.932 millones de dólares el sábado por la noche, rompiendo el récord de la mayor cantidad jamás pagada por una tarjeta deportiva.
La tarjeta Upper Deck Exquisite Collection Dual Logoman Autographs Jordan & Bryant 2007-08, con folio 1 de 1, superó a la tarjeta Topps Mickey Mantle de 1952, que se vendió por 12.6 millones de dólares a finales de agosto de 2022. La tarjeta Jordan-Bryant se vendió a través de Heritage Auctions; no se reveló la identidad del comprador.
La tarjeta coleccionable de Jordan y Bryant superó a una de Mickey Mantle de 1952 como la más cara. | Cortesía Heritage Auctions
La tarjeta Jordan-Bryant es el segundo artículo deportivo coleccionable más caro de todos los tiempos, después de la camiseta de Babe Ruth de la Serie Mundial de 1932, que se vendió por 24.12 millones de dólares hace casi un año.
Chris Ivy, director de subastas deportivas de Heritage, comentó que recuerda cuando Upper Deck lanzó Exquisite por primera vez, cobrando $500 por un paquete/caja de cinco tarjetas para el lanzamiento de 2003-04. Ése fue el set con una tarjeta de novato de LeBron James de $5.2 millones, que anteriormente ostentaba el récord de la tarjeta de baloncesto más cara hasta el sábado.
“Se burlaron un poco, pero atrajo a un grupo demográfico que no estaba interesado en trucos publicitarios: sólo querían lo mejor de lo mejor”, dijo Ivy. “Añadían parches y firmas, Logomen, ésta fue una de las primeras veces que se usaron los logotipos de camiseta de esta manera”.
En los años posteriores, las líneas National Treasures y Flawless de Panini, que ahora cuestan más de $3,000 por caja al momento del lanzamiento, se han convertido en la referencia del baloncesto.
“Pero Exquisite fue primero, Exquisite abrió el camino”, dijo Ivy. Es la cumbre entre los coleccionistas de tarjetas modernas, y ésta es la única vez que ha habido Logomans autografiados por Jordan y Kobe. No se puede crear otra. Los coleccionistas de baloncesto modernos siempre la han considerado el santo grial.
Su rareza explica su precio, a pesar de que la tarjeta sólo recibió un 6 de la calificadora Professional Sports Authenticator (PSA).
“Una Fleer Jordan de 1986 con grado 6 se vende por un par de miles de dólares, mientras que una con grado 10 se vende actualmente por casi 200,000 dólares”, dijo Ivy. “Las calificaciones son importantes para el precio de las tarjetas estándar, pero ésta es una copia única, por lo que la calificación es menos importante en general para el rendimiento de la tarjeta”.
Ivy explicó que la consignación de la tarjeta estaba en proceso desde febrero. El anterior propietario conservó la tarjeta durante más de una década y rechazó ofertas privadas de “siete cifras” en lugar de una subasta abierta, donde Heritage creía que superaría con creces los 5 millones de dólares.
“El precio estimado previo a la subasta superaba los 6 millones de dólares, así que a veces, si una pieza es tan única como ésta, es realmente beneficioso dejarla vivir”, dijo Ivy. “[Donde] pueden surgir nuevos coleccionistas o personas dispuestas a participar y pagar más”.
Ivy también señaló que, tras el escándalo de objetos fraudulentos de Brett Lemieux, la autenticidad de Bryant y Jordan es “irrefutable” con esta tarjeta. Lemieux alegó que el mercado se inundó con artículos fraudulentos tras la muerte de Kobe Bryant en 2020. El subjefe de policía de Westfield, Indiana, declaró a ESPN el viernes que no tienen novedades sobre el caso.