Las comparaciones son absurdas, pero Juan Pueblo las hace y pone en la balanza lo que tenían y lo que tienen.
Ya al final de la administración de Mario Dávila, ordenaron una encuesta en la que el resultado no fue nada bueno para el entonces alcalde.
Alfonso Garza maquilló el resultado e hizo creer a Mario que estaba en el país de las maravillas, que la gente casi lo idolatraba.
Lo cierto es que el resultado de ese estudio distaba mucho de lo que el hacedor de candidatos le mostró a Mario.
La peor calificación la tenía en su cercanía con la ciudadanía, estaba reprobado y lo que le sigue.
El resultado de la elección le abrió los ojos. Siempre lo mantuvieron engañado.
CUMPLIDOR
Lo anterior viene a colación por lo que manifiesta el vecino de Carlos Villarreal.
Por allá en una colonia, una dama salió al ruedo y dijo que Monclova tiene, por mucho, al mejor Alcalde.
Se refería a la atención que tiene el Alcalde con la gente, la cercanía, el saludo, el apapacho, eso cuenta.
Y Gabriel Elizondo, el que manda en Mejora Coahila le pone la cereza al pastel.
Dice el funcionario estatal que Monclova tiene un alcalde de compromiso y cumplidor.
LA REUNIONCITA
Como 100 años de cárcel, si fuera el caso, había en la reunión que habría organizado Gerardo García, al que en su administración conocieron mejor como Gerry patas flacas.
Ahí estaba el ex alcalde panista y que después se fue al PRD, bien pagado.
Anote a Jesús Pruneda que después de estar en Catastro su negocio de bienes raíces creció como la espuma.
Jorge Luis Mireles, Rolando Valle, y otros más en esa reunión.
EMPRENDEDORAS
Ninguna Presidencia Municipal podrá darle trabajo a todos que lo soliciten.
Pero en el caso de Sara Irma Pérez se enfocó en darles a las mujeres las armas necesarias para que se puedan autoemplear.
Apenas terminaron los cursos y fueron 170 mujeres las que están listas para que puedan, de a poco, emprender su propio negocio.
A eso le está apostando la Alcaldesa de Frontera y le está dando resultado.
ALIANZAS
Los que saben de alianzas y coaliciones entre partidos políticos, le apuestan a que sí habrá entre Morena y Partido del Trabajo… pero a medias.
A Diego del Bosque le pareció ridícula la denuncia que el PAN colocó contran Sóstenes Mejía, pero nunca habló sobre la inocencia del coordinador del PT.
Mejía no sólo es especialista en juntarse con personales de mala calaña, también en romper las alianzas.
Sí habrá alianza pero donde mejor le convenga al gatito delincuente.
LA DECEPCIÓN
Han visto de todo en la izquierda, en Morena, y quedaron asqueados no del partido, más bien de los personajes que manejan a ese partido.
Morenistas que narran a este Confesionario cómo a los que idolatraban se iban perdiendo en sus ambiciones.
José Guadalupe Céspedes, Leonardo Rodríguez, Roberto Elizondo, Isidro Ruiz, son algunos de los que podían presumir ser conocidos de Andrés Manuel López Obrador, lo saludaban de mano y los conocía por su nombre.
Han estado por años en la izquierda y no pretenden cambiar de rumbo, quieren que cambien las figuras ya muy desgastadas.
En el 2000, narra uno de los morenistas, me enojó que cuando México estaba listo para el cambio, el cambio se diera con Vicente Fox y no con López Obrador, quien me parecía la mejor opción, pero que no fue candidato porque Cuauhtémoc Cárdenas se empeñó en ser de nuevo.
Prosigue: En el 2006 me convencí de que López Obrador no era de izquierda, sino un loco y mediocre lleno de resentimiento… más ladrón que el más ladrón de los burgueses.
Es sencillo: Dime de qué presumes y te diré de qué careces... y López Obrador presumía la honestidad que jamás ha conocido.
En el 2012 volví con López Obrador, nomás por el coraje, por la rebeldía de no permitir que nos impusieran un presidente.
Me dio asco en esa noche de la elección, ver a Víctor Trujillo (sí, el Brozo tenebroso) en una mesa en la que daba triunfador a Peña Nieto, sin tener siquiera los datos medio oficiales a la mano.
Y llegó el 18… López ya es un loco desatado… un peligro inminente.
Divide al país… pone en pleito a padres contra hijos…Ya se decía que estaba muy cerca del crimen organizado.
Se anticipó que con él se nos venían tiempos oscuros de inseguridad.
La pregunta es obligada: ¿Siguen creyendo en la izquierda?
La respuesta es inmediata: ¡sin duda!
Pero la izquierda no habita en un partido o en algunas siglas.
La izquierda es una manera de ver y entender el ejercicio del poder con vocación de hacer por los necesitados lo que nunca se hizo, para darles el margen de salir de la pobreza.
De hecho, el mejor programa de izquierda que se ha visto, es el que empujó Carlos Salinas de Gortari con Solidaridad… ese sí transformó a México.
Así que la izquierda es libertad en sí misma…
Pero López Obrador y su camarilla, nos jalan con la zanahoria que tiene por objetivo hacernos creer que vamos directo a la izquierda.
En realidad, vamos hacia el colapso.
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